Este artículo fue publicado en el “Huffington Post” por la actriz Jenny McCarthy. Habla la verdad sobre el autismo la cual no es bien recibida por el mundo corporativo. Pero cuando una persona valiente dice la verdad hay que reconocerlo. Esta es otra evidencia más de lo que hemos tratado sobre las vacunas, lean:
Hagan comentario en HuffPo.
http://www.huffingtonpost.com/jenny-mccarthy/whos-afraid-of-the-truth_b_490918.html
Los padres de niños recuperados, y he conocido a cientos, todos compartimos la misma experiencia. De los que dudan y niegan y que nos dicen que nuestros hijos nunca debieron haber tenido incluso el autismo. O que la recuperación era simplemente el curso de la naturaleza. Todos conocemos mejor, y francamente, estamos muy ocupados ayudando a otros padres para conocer la verdad.
En una esquina están los cientos de médicos que se especializan en la recuperación del autismo, Ellos te dirán historias de decenas de niños que ya no tienen autismo. Pídanles hablar con la prensa y empezarán a correr a la puerta. Ellos saben mejor.
La mayoría de los médicos en nuestra comunidad comparten un rasgo común: su propio hijo retrocedido en el autismo. Salvaron su primer hijo y sabían que tendrían que pasar su vida ayudando a los padres hacer lo mismo. Aceptar ir en contra de la "corriente principal" en su campo.
¿Quién teme a la recuperación del autismo? Tal vez sea los diagnosticadores y los pediatras que han hecho una carrera al decirles a los padres que el autismo es una condición sin esperanzas.
Cuando fui por con mi hijo, la historia de Evan, me preparé para hablar de la "R" de recuperación. Pero pronto me pasaba la mayor parte de mi tiempo hablando de la palabra "V" de vacunas.
Es difícil abordar uno sin el otro porque muchos de los padres de niños recuperados, yo incluida. Culpan a las vacunas por la regresión de su hijo en el autismo y lesiones del uso de la vacuna como la hoja de ruta para tratar a su hijo.
La idea de que las vacunas son una causa primaria de autismo no es tan chiflada como algunos desearían. El autismo aumentó 60 veces más en 30 años y coincide con una triplicación del programa de vacunas de EE.UU.
Con tantos niños con autismo, el medio ambiente tiene que ser el culpable, y las vacunas son un culpable obvio. Casi todos los niños reciben vacunas, inyectando toxinas, muy temprano en la vida. Nuestro propio gobierno reconoce claramente que las vacunas causan daño cerebral en algunos niños vulnerables.
Tome los simples hechos junto con decenas de miles de informes de los padres de la regresión después de la vacunación. Por no hablar de una creciente lista de casos judiciales en que nuestro gobierno pagó los reclamos a los niños con autismo. Reconociendo las vacunas como el gatillo. Este reclamo que las madres están haciendo hace sentido.
http://www.huffingtonpost.com/jenny-mccarthy/whos-afraid-of-the-truth_b_490918.html
No vacunes a tus hijos, seamos sobrios.
jueves, 11 de marzo de 2010
Jenny McCarthy en Huffington Post: ¿Quién le Teme a la Verdad sobre el Autismo?
0 comentarios:
Publicar un comentario