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Trabajadores franceses comenzaron su última serie de ataques hace una semana en protesta contra el gobierno. Este planea aumentar la edad de jubilación y hacer reformas al instituto de pensiones. El gobierno, que sostiene que Francia ya no puede afrontar los pagos de jubilación anterior, no ha dado señales de dar marcha atrás. Los analistas dicen que la reforma de pensiones que será probablemente un momento decisivo en la presidencia de Nicolás Sarkozy.
Criticando a Sarkozy durante una entrevista de CNN sábado, el alcalde de París Bertrand Delanoe, acusó al presidente francés de "arrogancia". Sin embargo, Sarkozy insiste en que los cambios son necesarios debido al aumento de longevidad de vida. Esta aumenta la carga financiera para el sistema de pensiones.
Un comité de crisis de gobierno se reunió por primera vez el lunes para discutir la situación del combustible, dijo un portavoz del Ministerio del Interior. El grupo, que será dirigido por el ministro del Interior Brice Hortefeaux, tendrá como objetivo "coordinar la acción de los diferentes departamentos estatales para asegurar un suministro continuo de combustible."
El primer ministro, Francois Fillon, dijo la noche del domingo que "no va a dejar que la economía francesa se asfixie por un bloqueo de combustible. No habrá escasez, porque vamos a tomar las decisiones necesarias... para garantizar que este país no sea bloqueado", dijo en la televisión TF1.
Así que seguramente debe ser bienvenido el alivio a todos aquellos que están esperando al gas durante horas. Además, el combustible podría llegar a ser la menor de las preocupaciones del país.
Mientras tanto, los jóvenes franceses que se han unido a la causa. Quemaron neumáticos y establecieron bloqueos el lunes frente a algunas escuelas secundarias en París y los suburbios cercanos. Los alumnos del Liceo Joliot Curie, en el suburbio parisino de Nanterre, trataron de bloquear su escuela con cerca de 100 de ellos frente a frente contra la policía.
Trabajadores franceses comenzaron su última serie de ataques hace una semana en protesta contra el gobierno. Este planea aumentar la edad de jubilación y hacer reformas al instituto de pensiones. El gobierno, que sostiene que Francia ya no puede afrontar los pagos de jubilación anterior, no ha dado señales de dar marcha atrás. Los analistas dicen que la reforma de pensiones que será probablemente un momento decisivo en la presidencia de Nicolás Sarkozy.
Criticando a Sarkozy durante una entrevista de CNN sábado, el alcalde de París Bertrand Delanoe, acusó al presidente francés de "arrogancia". Sin embargo, Sarkozy insiste en que los cambios son necesarios debido al aumento de longevidad de vida. Esta aumenta la carga financiera para el sistema de pensiones.
Un comité de crisis de gobierno se reunió por primera vez el lunes para discutir la situación del combustible, dijo un portavoz del Ministerio del Interior. El grupo, que será dirigido por el ministro del Interior Brice Hortefeaux, tendrá como objetivo "coordinar la acción de los diferentes departamentos estatales para asegurar un suministro continuo de combustible."
El primer ministro, Francois Fillon, dijo la noche del domingo que "no va a dejar que la economía francesa se asfixie por un bloqueo de combustible. No habrá escasez, porque vamos a tomar las decisiones necesarias... para garantizar que este país no sea bloqueado", dijo en la televisión TF1.
Así que seguramente debe ser bienvenido el alivio a todos aquellos que están esperando al gas durante horas. Además, el combustible podría llegar a ser la menor de las preocupaciones del país.
Mientras tanto, los jóvenes franceses que se han unido a la causa. Quemaron neumáticos y establecieron bloqueos el lunes frente a algunas escuelas secundarias en París y los suburbios cercanos. Los alumnos del Liceo Joliot Curie, en el suburbio parisino de Nanterre, trataron de bloquear su escuela con cerca de 100 de ellos frente a frente contra la policía.
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