Desde La Azotea
29 de diciembre 2011
Seamos Sobrios
El juego peligros de ajedrez sigue en el Medio Oriente. Las piezas se ponen en posición y los jugadores contemplan su próxima movida. Si piensan que Irán no sabe jugar, recuerden que el ajedrez es un juego persa. ¿Nuestras movidas? Orar por la paz de Jerusalén, redimir el tiempo predicando su Palabra, y prepararnos para la crisis que viene.
29 de diciembre 2011
Seamos Sobrios
El juego peligros de ajedrez sigue en el Medio Oriente. Las piezas se ponen en posición y los jugadores contemplan su próxima movida. Si piensan que Irán no sabe jugar, recuerden que el ajedrez es un juego persa. ¿Nuestras movidas? Orar por la paz de Jerusalén, redimir el tiempo predicando su Palabra, y prepararnos para la crisis que viene.
Seamos Sobrios
Debka files
29 de diciembre 2011
Las fuerzas de EE.UU. y la OTAN en el Golfo Pérsico han sido puestas en alerta después de que la inteligencia de EE.UU. advirtió que la Guardia Revolucionaria de Irán está preparando comandos iraníes de su marina para sembrar minas en el estratégico Estrecho de Ormuz.
El nuevo despliegue, según informes de fuentes militares de DEBKAfile, consiste en el USS de Tarea Conjunta de la Fuerza 52 (CTF 52), y en el Grupo anti Mina Marítima 2 (SNMCMG2) de la OTAN. El USS está entrenado y equipado para el desmantelamiento minas marinas. El grupo estadounidense está liderado por el buque contramedidas USS mina Arden. El de la OTAN por el dragaminas británico HMS Pembroke.
Los demás barcos en los grupos de trabajo son el destructor HMS Middleton y los barcos de guerra franceses FS Croix du Sud y Var FS. También en la lista hay varias unidades de EE.UU. como: el Grupo Expedicionaria para la preparación para el combate de los EE.UU., y el comando de la Quinta Flota en Bahrein.
Diecisiete de estas unidades marinas especiales se unen a la Quinta Flota de Estados Unidos como respuesta a los botes de asalto rápido y las unidades de infantería marina de guerra iraní.
Según fuentes militares dijeron a DEBKAfile Miércoles, 28 de diciembre, que Estados Unidos tiene las contramedidas para barrer la vía de las minas y hacer seguro para el paso del mar después de no más de una interrupción de 24 a 48 horas. Al mismo tiempo, altos funcionarios militares y navales de Washington tomaron las amenazas de Teherán en serio. No compran la tesis de varios expertos y analistas estadounidenses de que Irán nunca cerraría el Estrecho de Hormuz. Por el Estrecho de Hormuz pasa un tercio del petróleo mundial. Lo que sería una botella para aumentar sus exportaciones de energía.
Los funcionarios, según nuestras fuentes, creen que Teherán espera que las minas en el canal hagan explotar los barcos petroleros y otras embarcaciones. No tienen que ser sellados herméticamente para poner en peligro la navegación internacional. Con unas pocas minas aquí y allá, y una explosión sería suficiente para disuadir a los transportistas y las tripulaciones de arriesgar sus buques.
Como el almirante Habibollah Sayari, comandante de la marina de guerra iraní, expuso el Miércoles, 28 de diciembre: "El cierre del estrecho de las fuerzas armadas de Irán es muy fácil - o, como decimos en Irán, más fácil que beber un vaso de agua". Él continuó diciendo: "Pero hoy en día, no es necesario [para cerrar] el estrecho, porque tenemos el mar de Omán bajo control y podemos controlar el tránsito."
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